más >>>Introduccion a las Sagradas Escrituras
LA INSPIRACIÓN.
Podemos empezar el tema de la inspiración dejando que sea el mismo Magisterio de la Iglesia nos lo explique.
LA ENCÍCLICA PROVIDENTISSIMUS (León XIII)
En 1893 aparece la primera gran Encíclica sobre problemas bíblicos. Allí se da una definición de lo que sería la inspiración; el método a seguir y normas de crítica histórica. El documento habla de la Biblia como una forma sobrenatural che envuelve directamente los escritores humanos en su dimensión intelectiva, volitiva (voluntad) y operativa. Dios – Espíritu Santo es el autor principal de toda la escritura (tiene a Dios como Autor). Acerca de la inerrancia: no se puede restringir la inspiración solamente a algunas partes de la Sagrada Escritura o decir que el mismo autor se equivocó; y así tampoco se puede decir que la inerrancia se extiende únicamente a cosas que respectan la fe y las costumbres; se estima así erradamente que no se debe buscar tanto que cosa dijo Dios sino el motivo por el cual las haya dicho. Así no es correcto decir que algunos errores se les escapó a los hagiógrafos (escritores) por ser instrumentos del espíritu. Se concluye entonces que todas las partes fueron escritas bajo la inspiración del Espíritu Santo; esto no sólo no admite cabida al error sino que lo excluye. Con respecto a cuáles son los Libros Sagrados, repite la doctrina del Vaticano I sin enumerarlos. Un problema viene a ser los diferentes argumentos científicos que la"
LA INSPIRACIÓN.
Podemos empezar el tema de la inspiración dejando que sea el mismo Magisterio de la Iglesia nos lo explique.
LA ENCÍCLICA PROVIDENTISSIMUS (León XIII)
En 1893 aparece la primera gran Encíclica sobre problemas bíblicos. Allí se da una definición de lo que sería la inspiración; el método a seguir y normas de crítica histórica. El documento habla de la Biblia como una forma sobrenatural che envuelve directamente los escritores humanos en su dimensión intelectiva, volitiva (voluntad) y operativa. Dios – Espíritu Santo es el autor principal de toda la escritura (tiene a Dios como Autor). Acerca de la inerrancia: no se puede restringir la inspiración solamente a algunas partes de la Sagrada Escritura o decir que el mismo autor se equivocó; y así tampoco se puede decir que la inerrancia se extiende únicamente a cosas que respectan la fe y las costumbres; se estima así erradamente que no se debe buscar tanto que cosa dijo Dios sino el motivo por el cual las haya dicho. Así no es correcto decir que algunos errores se les escapó a los hagiógrafos (escritores) por ser instrumentos del espíritu. Se concluye entonces que todas las partes fueron escritas bajo la inspiración del Espíritu Santo; esto no sólo no admite cabida al error sino que lo excluye. Con respecto a cuáles son los Libros Sagrados, repite la doctrina del Vaticano I sin enumerarlos. Un problema viene a ser los diferentes argumentos científicos que la"
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